Trasplante de médula ósea - BMT
Hay algunas células en nuestro cuerpo que pueden dar lugar a todo tipo de células sanguíneas y también al sistema inmunológico (de defensa). Se les conoce como células progenitoras hematopoyéticas o células madre.
En el BMT, las células enfermas de la médula ósea se reemplazan por otras sanas. La indicación de este procedimiento dependerá de algunos factores, como la necesidad de realizar el procedimiento, la condición clínica del paciente, la edad, enfermedades previas y si existe un donante compatible (en el caso de un alotrasplante).
BMT es un procedimiento complejo que proporciona una cura para algunas enfermedades hematológicas malignas y benignas, neoplasias no hematológicas y enfermedades autoinmunes.
Existen dos tipos de BMT: autólogo (donde el propio paciente es el donante) y alogénico (donde se utiliza otro donante: familiar, donante no emparentado o de cordón umbilical).
Durante el BMT, se infundirán células progenitoras en el paciente mediante un procedimiento similar a una transfusión de sangre; estos se alojarán en la médula ósea y comenzarán a producirse. Alrededor de 2 a 4 semanas después de la infusión, la médula “aceptará”. Este procedimiento es la única alternativa curativa en muchos casos.
Sobre la donación de médula ósea
Hay tres fuentes de células que se pueden utilizar para el BMT: la sangre periférica, la propia médula ósea y el cordón umbilical. Al donante se le realizará una confirmación de compatibilidad mediante una prueba HLA (antígeno leucocitario humano), y se le realizarán unos análisis de sangre y una consulta previa al procedimiento para aclarar dudas y detalles sobre el proceso, además de confirmar su buen estado de salud e idoneidad. para donación. Existen dos tipos de procedimientos para realizar la recolección: no quirúrgicos y quirúrgicos.
Procedimiento no quirúrgico: Cinco días antes de la donación, el donante recibe inyecciones subcutáneas de un medicamento llamado filgrastim. Este medicamento estimula la liberación de células madre al torrente sanguíneo. El día de la donación, la sangre se extrae mediante un procedimiento llamado aféresis, en el que se realiza una punción venosa, normalmente periférica, y se conecta al donante a una máquina donde se separan las células madre del resto de la sangre. donación. La sangre restante regresa al donante y el procedimiento dura entre 3 y 4 horas.
Procedimiento quirúrgico: las células madre se extraen mediante punciones en la región de los huesos pélvicos posteriores (pelvis). El donante se somete a anestesia y no siente nada durante el procedimiento, que dura entre 90 y 120 minutos. Podrá ser dado de alta el mismo día o al día siguiente de la cirugía, dependiendo de la valoración del médico que recogerá las células.
Riesgos relacionados con la donación: al donar sangre periférica se puede producir dolor óseo debido a la estimulación de la médula ósea por el filgrastim. Durante la aféresis, puede producirse hormigueo en manos y labios. Los donantes pueden regresar a sus actividades al día siguiente. En la donación mediante procedimiento quirúrgico, puede aparecer dolor en el lugar de la punción, que tiende a desaparecer en pocos días, y anemia, que mejorará rápidamente; se podrá instaurar suplementación con hierro si el médico lo considera necesario. En casos raros, será necesaria una transfusión de sangre. La mayoría de los donantes pueden regresar a sus actividades habituales dentro de 3 a 7 días. Las células progenitoras hematopoyéticas proliferan de forma natural y, por este motivo, aproximadamente dos semanas después de la donación, el cuerpo del donante estará completamente recuperado.